
Mandela: Del mito al hombre
Dirección: Justin Chadwick
Año: 2013.
Género: Drama, Biografía.
11/02/2015
Dos meses y seis días llevaba Nelson Mandela de fallecido al ver esta película que es la primera de muchas para este semestre universitario, donde ahora me enfrento a conocer la historia del cine y todos esos misterios, que aspiro yo, me abran la mente y pueda entender un poco más las virtudes y realidades que ofrece este arte. Mandela fue ese político que cambió los esquemas de una sociedad referente a las opresiones violentas que recibía la comunidad de en Sudáfrica. Todo un proceso de cambio que se vió afectado por los rebeldes y la crueldad que vivió Nelson Mandela al estar 27 años en la cárcel sin justa causa, todo por ser considerado un terrorista cuando en realidad era un líder innato en busca de algo mejor para su país.
Antes de ver la película quise conocer un poco más de este personaje, ya que al ser un nombre conocido en todo el mundo, consideraba que su biografía es muy amplia y es necesario conocerla para crear un espacio-tiempo entre la realidad y lo que estaba a punto de ver en “Mandela, Un largo Viaje” Opté porque fuera un viaje y así fue. Acepto que hubo dificultades ya que este no es el tipo de cine que consumo generalmente, pero es tiempo de cambiar vertientes y llenar mis ojos de nuevas perspectivas. “¡Vamos a la resistencia! ¡Somos la nación! Nosotros somos la gente de esta nación. Pero, no tenemos poder. No tenemos derechos. No tenemos justicia. Sudáfrica es ahora una tierra regida por las armas. Ha llegado el momento de decidir. Hay dos opciones: Someterse o luchar. ¡Debemos luchar!”. Tal vez se puede pensar que estas palabras llenas de fuerza que irrumpen en una sala son de una persona inconforme con su realidad y que anhela tener el poder por sobre cualquier medio, y así, imponer las ideas individuales para hacerlas comunes. Pero esto no está mal. Dejarse someter o luchar son los extremos en los cuales Mandela se tuvo que dividir en toda su vida; más que dividir, tuvo que soportar para tener un mejor país.
La película está llena de momentos los cuales hacen que uno como espectador realice una inmersión en todo lo que Mandela siente. Desde su infancia fue destinado a despedirse de su niñez pero adoptando un pensamiento en donde el orgullo para con los que él amaba fuera la base de todo. Luego iniciar procesos de vida comunes y acepto que esa decisión de alejarse de todas sus creencias y convertirse en un profesional es empezar en definitiva con lo que se va a ser en el futuro. La cuestión de renunciar a lo impuesto y buscar lo que se quiere.
Los planos te ofrecen sensaciones diferentes en donde se sufre, se busca, se siente y se espera. Son esos momentos en que a pesar que se conoce una historia, esa forma en que la narrativa te cuenta las cosas, hay reacciones que hasta para mí fueron inesperadas. Mandela se convirtió en un ídolo en pro de la lucha de la paz y la igualdad y el ser presidente, salir de la cárcel, ganar Nobel, lograr que un partido de Rugby rompa en dos la historia entre personas blancas y personas negras para el trato desigual desparezca, y otros logros por este ser humano, me hicieron considerar a Nelson Mandela como ídolo y de igual modo, esta película me hizo sentir reflexivo, nuevo, cuestionado por esos actos que ojalá no queden en el olvido.
